Los hay, son sencillos y te pueden permitir ahorrar incluso 100€ a largo del año. Echa un vistazo a estos consejos para pagar menos en tu factura de la luz.
Contratar la potencia adecuada
¿Cuál es la potencia más adecuada para tu hogar? Para saberlo, es conveniente revisar las instrucciones de los aparatos de electrónica que tienes en casa para ver qué potencia necesitan.
Suma el consumo de los dispositivos que sueles conectar al mismo tiempo y deja un margen para la luz y la conexión de otros útiles, como el cargador del teléfono.
¿Cómo hacer el cálculo?
Fíjate en los kilowatios por hora que consumen (por ejemplo, una lavadora puede tener un consumo de 1,5 kw/h; un horno, de 1,2 kw/h o una televisión, de 0,3kw/h).
Si habitualmente conectas la televisión y, por ejemplo, la lavadora al mismo tiempo y contando con el consumo de las bombillas y otros aparatos que tenemos siempre encendidos, como el frigorífico, nuestra potencia debería rondar los 4 kw.
Contratar una potencia superior nos llevará a pagar más. Haciendo este sencillo ejercicio podemos saber la que realmente necesitamos y evitar incrementar el gasto de nuestra factura de la luz.
Y si quieres saber el coste de tu consumo, basta con hacer lo siguiente:
- Multiplica el consumo del aparato eléctrico por el tiempo que permanece conectado. Por ejemplo: Una lavadora consume 1,5 kw/h y está en funcionamiento durante una hora. Ergo su consumo es 1,5 kw.
- Multiplica el consumo por el coste el kilowatio (esta información la puedes encontrar en tu factura de la luz). Es habitual que su coste ronde los 0,11€ kw/h. Siguiendo con el ejemplo anterior, poner la lavadora nos costaría 0.17€.
No dejes los aparatos eléctricos en stand-by
En modo reposo, se consume energía. De acuerdo a la OCU, apagar completamente los dispositivos nos puede permitir ahorrar hasta un 10% a final de año. Aquí puedes ver la potencia que gastan los aparatos electrónicos en stand-by y cuánto supone para nuestro bolsillo. Por ejemplo, un router en reposo puede generar un consumo anual de 70 kw, con un gasto de alrededor de 12€.
Usa la tarifa horaria
La tarifa horaria establece dos periodos diferenciados de consumo (y de precio). En los momentos en los que habitualmente hay más consumo, normalmente, entre las 12 del mediodía y las 10 de la noche, el coste es superior. En el resto de horas el precio por Kw es inferior y puedes llegar a ahorrar más de 40% en tu factura.
Cámbiate al LED
Una bombilla LED puede llegar a consumir hasta un 90% menos que una convencional. Mientras que una bombilla estándar incandescente E 27 consume 40W, una análoga LED consume 5W, es decir, un 85% menos.