Ponerse en forma es uno de los principales propósitos de año nuevo. Un proceso que, en algunas ocasiones, puede generarnos algún que otro quebradero de cabeza. Principalmente, por dos motivos: el tiempo y el dinero. Dos condicionantes que afectan al ejercicio físico y al eterno propósito de ponerse las zapatillas y la ropa de deporte de una vez por todas. Sin embargo, hoy en día, existe una forma sencilla y más económica, que es iniciarse en el fitness en casa.
Gracias a estas sencillas recomendaciones que te contamos a continuación, podrás sentar las bases para crear el hábito de hacer ejercicio sin necesidad desplazarte. Lee con atención y empieza a dejar atrás los excesos navideños sin perder un ápice de comodidad.
- Entrena siempre en el mismo sitio. Escoge una estancia de tu casa en la que poder ejercitarte. Allí, podrás comenzar a crear el hábito de la rutina fitness. Depende del espacio del que dispongas, pero no tiene por qué ser muy grande. Una esterilla, unas mancuernas y una buena predisposición pueden bastar.
- Establece un horario. Es importante destinar una hora fija, como si fueras a ir al gimnasio convencional, para crear una mayor adhesión en esta nueva rutina de fitness en casa.
- Evita tener cerca el móvil y otros dispositivos que puedan distraerte. La concentración es fundamental, con el objetivo de sacar el máximo provecho al ejercicio físico. Por ello, el ordenador o el móvil pueden ser “ladrones de tiempo”.
- La música, un plus de energía extra. Aunque puede parecer contradictorio con respecto al punto anterior, una lista de reproducción que te motive puede ayudarte a concentrarte más. Sin embargo, puede haber personas a las que les suponga una distracción. Tú eliges.
- Utiliza ropa y calzado adecuados. Es una obviedad, pero la vestimenta juega un rol clave en el entrenamiento. Tienes que estar cómoda, con prendas que te permitan realizar los ejercicios sin sobreesfuerzos inútiles.
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